La sexualidad femenina.

  217     La sexualidad femenina  

Toda mujer lleva en si algo que la hace especial y única. Carga en sus adentros una esencia de exquisita frescura y pasión.

Ser mujer representa tener una picardía única e irresistible que se encierra en su misteriosa sexualidad.

La sexualidad femenina florece en nuestros días y despierta de todos los tabúes y restricciones que sufrió por décadas, para llegar a ser una parte integral de la mujer y complementarla en su desarrollo como persona y como pareja.

Por años existió la discriminación sexual hacia la mujer, la cual le impedía hablar sobre sus sensaciones, pensamientos, fantasías y deseos. Esto, no solo afectaba el placer sexual de las mujeres, sino que también ponía trabas en su desarrollo emocional y no las dejaba conocer las maravillas con la que la sexualidad plena y satisfactoria enriquece la vida.

Hoy por hoy, las mujeres son dueñas de su propio placer. Saben lo que quieren, son más seguras de si mismas, y conocen bien los buenos resultados que traen tomar las riendas en la cama.

Sin embargo, para muchas y muchos, la sexualidad femenina continúa siendo un misterio. Ellos se preguntan cual es la clave para satisfacerlas al máximo y que siempre pidan más; mientras ellas se cuestionan si están llegando hasta los límites de los territorios del placer o si solo están viendo hasta donde su nariz les permite.

El placentero encanto de la sexualidad en la mujer.
Una de las grandes y mayores sensaciones de satisfacción en la vida de la mujer se encuentra al lograr un fabuloso orgasmo. Es como una lluvia de endorfinas que empapan al cuerpo de una rica sensación de bienestar y un sentimiento de confort indescriptible.

Muchas chicas, nunca han sentido un estallido de este tipo en sus entrañas. Lo que sucede es que desde el punto de vista científico el cuerpo de la mujer no está programado directamente para gozar.

Es decir, que el placer viene por añadidura, al contrario del hombre, quien necesita eyacular para reproducirse, ellas no necesitan eyacular para reproducirse ni para sentir un orgasmo. Así que como el cuerpo no tiene esa necesidad fisiológica, no ve la necesidad de producirla, entonces es la mujer quien debe trabajar por su parte para conseguirlo.

Esto responde a la pregunta común de porque para ellos es tan fácil, pero a ellas se les complica tanto, en ocasiones, llegar a la cumbre del placer femenino.

Pero, físicamente el cuerpo de cada mujer esta hecho para sentir sensaciones sensuales y divinas en sus genitales. De hecho, el clítoris es una de las zonas con más terminaciones nerviosas en el cuerpo. Alrededor de 8.000 terminaciones nerviosa envuelven al clítoris y le dan la perfecta razón de ser el órgano meramente sensitivo por excelencia.

Para aquellas que sientan gran dificultad en el camino hacia el orgasmo, recuerden que tienen que sentir placer por si mismas antes de esperar recibirlo con la pareja. Estos son algunos útiles consejos:

Practicar la masturbación: La masturbación es una excelente manera de descubrir lo que nos gusta, donde y como nos gusta. Llevarla a cabo tiene enormes beneficios para practicar la sexualidad en pareja y para conocer sensaciones que tal vez no conocían pero que existen.

Comprar un vibrador: Los vibradores son muy recomendados por los sexólogos en casos de problemas con el orgasmo. Los vibradores, o dildos, ayudan a la mujer a conocer y despertar sus zonas erógenas mediante el buen tipo de estimulación vibratoria y sensitiva que brinda.

Usar un espejo: Acuéstate boca arriba con tu pelvis elevada sobre unas almohadas y observa con detenimiento tus genitales. Además de mirarlos, puedes tocarlos y sentirlos. Este ejercicio es de autoconocimiento. Mediante la visión y el tacto, estarás más segura de las caricias que esas zonas desean recibir.

Nunca olvides que eres una persona única y que tus sensaciones son muy propias de ti misma. No te vayas a agobiar pensando que no sientes lo mismo que tus amigas dicen sentir durante el sexo. Lo que sucede es que todas las mujeres sois diferentes y tenéis maneras diferentes de sentir; vuestro cuerpo tiene sus propios medios de expresar el placer.

El cuerpo de la mujer está especialmente hecho para sentir. El orgasmo puede venir por estimulación del clítoris, de la vagina o de la mente. Así que si solo sientes algunos de estos tres, ponle más empeño a descubrir la sexualidad de las otras zonas, manifiesta curiosidad por otros tipos de excitación.

La salud en la sexualidad femenina.
La salud es un aspecto básico dentro de la sexualidad. No solo se trata de encontrar placer en cada encuentro sexual, se trata también de aceptar y cuidar el cuerpo para que no se enferme y de curarlo cuando alguna afección lo aqueje.

Uno de los puntos básicos para mantener una buena salud sexual es la higiene.

La higiene genital es tan importante en la mujer que no debe faltar nunca, es imprescindible. La correcta higiene genital puede evitar a la mujer problemas como infecciones vaginales, malos olores y problemas por hongos en la piel.

La higiene genital en la mujer se basa en el uso del agua y el jabón neutro, seguido por un buen secado con un paño limpio y seco. Abundante agua y jabón en los genitales externos bastan para mantener los genitales limpios, nunca debe entrar producto alguno dentro de la vagina, con excepción de los recetados por el médico.

En la buena sexualidad femenina, dentro de la prevención es vital la realización de chequeos ginecológicos.

Por ejemplo, el papanicolau anual es de gran ayuda para detectar el cáncer de cervix a tiempo.

El examen pélvico también debe hacerse en cada visita al ginecólogo, y este será una gran herramienta para verificar que los órganos sexuales marchen a la perfección.

Por vuestra parte, no debéis olvidaros cada mes de realizar un autoexamen de mamas, el cuál es la primera arma para detectar el cáncer de mama en sus inicios y poder combatirlo.

Otro punto dentro de la salud femenina es practicar el sexo seguro. El uso correcto de los métodos anticonceptivos servirá para prevenir desde un embarazo no deseada hasta un contagio de SIDA y cualquier otra ETS (enfermedad de transmisión sexual).

Visitar al médico cuando creáis que algo no marcha bien con vuestro ciclo menstrual o vuestros genitales es una medida necesaria. Así como también lo es visitar al sexólogo, psicólogo o terapeuta sexual cuando sintáis la necesidad de discutir algún problema que tengáis con vuestra sexualidad y los temas que giran en torno a ella.

La comunicación en la pareja es un aspecto clave para la salud de la sexualidad en la mujer.

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Fuente | Tu guía sexual
Imagen | Taringa