1.220 … Redecorando las vacaciones.
El diario de Bruno Fernández.
Bueno, todo lo bueno llega a su fin, pero en mi caso el fin de mis vacaciones terminó de Agosto, cuando un turno de 14 horas terminó con mis vacaciones.
Aunque este año fue un poco distinto, para que os voy engañar queridos Búhos y queridas Lechuzas porque este año pude disfrutar de 15 días en casa de mi hermana (como todos los años), donde nos reuníamos la familia Fernández, pero en esta ocasión este año fue distinto, porque en esta ocasión había un miembro más en la familia que era mi novio Pablo.
Después de tantos años, por fin le concedieron a Pablo los mismos días de vacaciones que yo, ya que el disfrutaba de ellas del 1 al 31 de Agosto y años anteriores pues como que no podíamos disfrutarla juntos.
Lleve a mi nene a Gran Canaria, donde reside mi hermana mayor y que, al cabo de unos días, se reunirían con nosotros mi hermana mediana con su marido e hijos. Otro año más, la familia Fernández estaba al completo, pero con un miembro más.
Durante estos quince días que disfrutamos de la estancia en las Islas Afortunadas sólo había una rutina: despertarse, comer, tarde de playa y noches de cena y paseos por la playa de esta maravillosa ciudad, por el cual no nos aburriríamos.
Pero claro, todo lo bueno llega a su fin. El 31 de Julio volvimos para A Coruña y por fin pudimos hacer lo que llevaba muchos años esperando a que llegase el día. Redecorar la casa, ya que pedía un pequeño cambio.
Durante los primeros días decidimos pintar el piso en donde vivimos, cambiando el color gris claro que tenía a un color blanco, para darle mas volumen al piso, por el cual, cada día que pintábamos una parte del piso, dormíamos en otra.
Cuando terminamos de pintar la casa, nos fuimos hasta el Ikea a comprar unas cuantas cosas para la cocina, el salón y las habitaciones, vamos, que hicimos una reforma completa. La habitación de mi hijo la eligió el, ya que es justo y ya que viene a pasar los días que me toca en mi casa, pues que tuviese la habitación a su gusto.
Después de montar las cosas y gracias a la ayuda de unos amigos que trabajan en dicho centro pues pudimos terminar el cambio, pero eso sí ¡¡No nos sobró ninguna pieza!!, jejejeje.
Perlo mejor vendría a mediados de agosto, unos días antes de volver al trabajo, donde mi pareja y yo rememoramos aquella noche mágica por el cual tenemos hoy una relación estable (un añito ya, como pasa el tiempo, ains), volviendo al lugar donde formalizamos esa relación.
Si tuviera que resumir estas vacaciones, la resumiría como reza el título del post: "Vacaciones en familia", "Reformas en casa" y "Recordando la noche mágica".
» Bruno Fernández.
