371 ¡Ya es verano!
El Sol calienta más con su luz la geografía y nuestros cuerpos; los días se hacen más largos, el aire es caliente y seco y todo nos invita a la vida al aire libre y a las actividades en el exterior: natación (la relación con el agua puede ser el complemento refrescante al calor del Sol), pasear en bicicleta, excursiones por la montaña, etc…
Nuestras energías se activan y nos sentimos más alegres y comunicativos; reímos y puede surgir en nuestro interior un sentimiento de amor y compasión hacia las personas de nuestro entorno. Son emociones que identificamos con nuestro corazón… ¿ese amor fugaz del verano? y con la pasión, el volcán de nuestro ánimo, cuando nos enamoramos, la sangre fluye más rápida y nos llega a las mejillas.
Señores, señoras, niños y niñas… ¡Ya estamos en verano!.
Cuando llega esta epata estival en la ciudades algo cambia, la gente va ligera de ropa y piensa en las futuras vacaciones, el día se alarga y en las playas se siente el intenso calor que nos invita a entrar al mar y los que viven en el interior pues su único consuelo son las piscinas municipales. También es una época del año donde cada fin de semana hay las fiestas patronales del pueblo.
También para muchos puede ser que vivan una pesadilla ya que cuando estás de terracita o en algún pub siempre suene la típica "canción del verano", esa época en que los intérpretes están poco inspirados y sacan a la venta la típica canción machacona que para unos estarán hasta las narices de oírla día sí y día también y otros que están felices de que suene porque saben que están en verano.
Cuando llega el verano a los tíos siempre se les plantea el mismo problema año tras año: "¿que bañador nos compramos?":
Para unos esos bañadores de competición, apretaditos en que te notas el "bollycao" y cuando te ves es casa dices: "aún tengo pegada".
¿El problema?, cuando llegas a la piscina o te vas a la playa a lucirlo siempre está el típico tocapelotas que te devuelve a la realidad y te espeta: "El bañador de competición está bien, lo malo es que tu cuerpo es amateur… das pena tío".
Para los que se compran esas bermudas floreadas amplias cuando quieres zambullirte en el agua, explota como el airbag del coche y te quedas como un nenúfar flotando en medio de la piscina, de un lago, o de la mar y te pasas varios minutos metiendo las burbujas para dentro.
Aunque también siempre siempre están los que casi nunca se compran bañadores, porque tienen la tradición de ir, año tras año, a una playa nudista (por el cual que te dado unos consejos hace unos días) y así siempre pillan el moreno integral y no cuando llega el invierno o cuando están en las duchas de un gimnasio o después de jugar un partidito para que vean que luces un morenazo 100% mientras que los otros tienes lo que tapa el bañador una zona blanca que parecen sepias.
En fin, lo importante es que estamos en verano, ya vayas a la playa o a la montaña o simplemente te quedes en la ciudad y puedas disfrutar de las piscinas, disfruta, estate alegre porque son 3 meses de tranquilidad, de alegría y sobre todo de descanso.
¡Que tengáis un buen verano!, que "La Morada del Búho” seguirá abierta hasta que cerremos por vacaciones.